Consigue hasta 3,000 euros para digitalizar tu PYME

En la actualidad, apenas un 10% de las pequeñas y medianas empresas vende sus productos a través de las redes o cuenta con una plataforma de venta online.

Tras la devastadora crisis que está generando la Covid-19, y los efectos que aún no queda padecer en el medio plazo, el Gobierno ha propuesto un plan transformador con el que prevé digitalizar las PYMES para permitir que puedan aprovecharse de la venta online, lo que supondría una nueva oportunidad para paliar las pérdidas y limitaciones que están sufriendo con la crisis. Según los datos que ha proporcionado el Ministerio de Industria, las PYMES en España conforman el 99% del tejido industrial del país, suponiendo casi el 65% del trabajo empresarial.

“España Digital 2025” Así se ha bautizado el plan de digitalización que viene de la mano del gobierno de Pedro Sánchez, quién espera invertir 15.000 millones de euros en un plazo no superior a los 4 años. De estas cifras, 4.656 millones irán destinados a la transformación de las pymes, con lo que se espera conseguir que el 25% de su volumen de negocio provenga de Internet.

Sin embargo, aunque la partida de 4.656 millones de euros pueda parecer jugosa, los cerca de 2,87 millones de pymes que se encuentran registradas en nuestro país hace que cada una de ellas solo perciba una media de 1.622 euros en cuatro años. No obstante, el plan del Gobierno no contempla llegar a todas, sino que las ayudas serán destinadas «al menos a 1.350.000 pymes, pudiendo elevarse hasta 1.500.0000»

Con esta medida se pretende alcanzar prácticamente a la mitad de las empresas, aunque los 3.104 euros de media que teóricamente recibirán serán insuficientes para conseguir transformar un modelo de negocio que tradicionalmente se centra en la venta física, donde solo 1 de cada 10 pequeñas empresas de menos de 10 empleados actualmente vende por Internet.

El sector empresarial confía en que esta partida de ayudas públicas no sea la única herramienta que tengan las pymes. Según el director de Ametic, la patronal de la industria digital en España, Francisco Hortigüela, estas ayudas supondrán un impulso para que motivar al sector privado, del cuál se espera que también contribuya al desarrollo online y multiplique su efecto. Hortigüela considera esencial este proceso de digitalización para impedir la desaparición de las pymes. «Estamos ante el reto de reconvertir nuestro sistema productivo tras la pandemia, no solo de recuperarlo».

¿Qué supone digitalizar una pyme?

Aunque para muchos la digitalización consiste en lanzarse al mundo online a través de plataformas como las redes sociales o incluso tener una página web, «Lo primero es conocer bien tu propio negocio y analizar cómo la digitalización puede mejorar los productos o servicios que ofreces», destaca Hortigüela. De hecho, y debido a las necesidades de muchas empresas por transformarse digitalmente, es cada vez más habitual la contratación de consultoras como SEOmmerce (que se dedica al “marketing para abogados” con un enfoque poco convencional).

Donde no sólo se trata de contar con un medio online o unos equipos informáticos más potentes, sino de analizar la estructura de la empresa para determinar cómo conseguir una reducción en los costes de producción, así como lograr una logística mucho más sencilla y eficiente, entre otros aspectos. «La digitalización es una herramienta, no un fin». Ese es el error que se comete muchas veces».

Hortigüela, además, destaca la importancia de la exportación internacional, base de salvación de muchas pymes, donde se consigue realizar una transformación en la que una pequeña empresa puede llegar a convertirse en una plataforma global. Es fundamental que la empresa pueda ser localizable cuando el usuario realiza una búsqueda de su producto o servicio.

La idea del plan es convertir ese 10% de venta en un 25%, en apenas 4 años.

Ese es el plan que mantiene el Gobierno, donde pretende aumentar el volumen de negocio a través del comercio electrónico en una era en la que, si ya era fundamental vender por internet antes de la pandemia, ahora lo es más. Carlos Ballesteros, doctor en Ciencias Económicas de la Universidad Pontificia de Comillas, ha asegurado que la venta online se ha disparado durante el confinamiento, permitiendo que las empresas preparadas pudieran mantener un volumen de negocio que dista mucho del de aquellas pymes que no estaban preparadas.

El doctor y profesor recomienda emplear una estrategia online donde la improvisación no tenga cabida, aunque la inversión para llevarla a cabo se dispara, haciendo inviable la iniciativa para muchas pequeñas organizaciones que subsisten como pueden. Según Ballester, los costes de la pasarela de pago y el montaje de la tienda no son los principales obstáculos para las pymes, «se trata de una inversión importante, pero no inalcanzable», donde sí habrá que prestar especial atención a los “servicios de última milla”, donde factores como la logística son clave para evitar que un producto llegue roto al cliente y la imagen de la empresa se vea deteriorada.

Una digitalización que mantiene y genera empleo

Un reciente informe de CeGe y Optimum ha revelado que la crisis generada por el virus ha propiciado un empujón de hasta el 60% a las intenciones de las pymes por adentrarse en el mundo digital y, aunque solo lo han conseguido menos del 30%, esta oportunidad abre multitud de nuevas vías de negocio en las que no necesariamente tienen que limitarse a vender sus productos en España.

Una encuesta realizada a empresas españolas por el Banco de España ha concluido que el empleo efectivo y la propia facturación se han reducido mucho más en las empresas más pequeñas, aquellas que no se encuentran en la red y carecen de recursos para hacerlo. Por su contra, aquellas empresas que sí se encuentran digitalizadas han podido mantener su plantilla e incluso ampliarla, ante la demanda generada por las limitaciones de movimiento durante la crisis.

ManpowerGroup, en su estudio “Skills Revolution Reboot” destaca la importancia del nivel de digitalización de las empresas en función del país en el que se encuentran. Resaltan que casi la mitad de las organizaciones de países como Reino Unido, Portugal o España afirmen no haber acelerado sus planes de digitalización, mientras que otros como Japón o Alemania hayan mejorado respecto a su posición anterior a la crisis. «Es evidente que a medida que llegan nuevos competidores al mercado, cada uno de ellos más innovador que el anterior, las organizaciones tradicionales no van a tener más remedio que actualizar su forma de hacer negocios», remarcan en el informe.

Fuente:  Edurne Martínez (21 de Febrero de 2021), Las Provincias